Alquilar un yate de lujo en vacaciones es una experiencia idílica. En una nave prodigiosa, rodeados de confort, exclusividad y elegancia, la posibilidad de vivir el Mediterráneo se eleva a la máxima expresión.
Un barco de lujo es un auténtico palacio flotante, pensado para relajarse totalmente y hacer de la temporada estival una ocasión especial.
¿Quieres alquilar un yate de lujo en Alicante y sentirte dueño del mundo este verano? Esto es lo que encontrarás en estos barcos de alta gama:
Un yate de lujo incluye una tripulación entrenada para prestar un servicio de primera. Rutas, comida, limpieza y atención están en manos de profesionales que ofrecen seguridad y atención personalizada. Incluso, puedes contratar tripulantes que hablen tu idioma (inglés, ruso, alemán) y te sentirás como en casa.
Un yate de lujo está equipado para recorrer grandes distancias y fondear en cualquier lugar y momento, a pedido de sus huéspedes. Cuando lo deseen, los pasajeros pueden disfrutar el Mediterráneo realizando las actividades náuticas de su preferencia: esquí acuático, snorkel, pesca o paseos en moto náutica y donuts hinchables. ¡Todo está incluído y al alcance!
A bordo, la sofisticación se multiplica: los barcos de lujo tienen espacios amplios y cómodos con recursos tecnológicos y de disfrute de última generación: jacuzzi, baño turco, cocina equipada, conexión WiFi, aire acondicionado, teléfonos internos y ordenador en cada camarote.
Para espíritus más aventureros, pero con el mismo carácter lujoso, el alquiler de veleros en Alicante, el alquiler de catamarán a vela o el alquiler de catamarán a motor son opciones con magníficas prestaciones que cumplen las expectativas de los amantes de la navegación.
El alquiler de un yate de lujo en Baleares es ideal para celebrar eventos, actividades o simplemente para realizar ese itinerario soñado en un fines de semana o semanas completas.
Prepárate para la travesía: sentirás el viento y el mar como tuyos y estarás bien atendido en todo momento. Tus vacaciones en un barco de lujo se convertirán en un recuerdo inolvidable.
¿Zarpamos?
Jacuzzi en Benetti 122
